sábado, 25 de diciembre de 2010

Terapias

Tengo una amiga que es genial, absolutamente genial. Siempre sabe que decirte, no importa que le digas tú, ella siempre sabe que decir. Cuando alguna de las dos tiene algún problema siempre terminamos a punta de vinos en alguna de nuestras casas, y el tiempo pasa y la conversación siempre es agradable e inteligente.

Fabi me invitó a almorzar a su casa el 23, ¡a claro! Y como poder olvidarlo, cocina buenísimo, y me alimentó ese día. Jugué con su gato, que es un “delincuente” (como solían ser los míos) me habló de su vida, brevemente, y luego critico mi aura gris de ese día “¿Pero es que mira como estás?” ella lo sabe todo, ella se da cuenta de todo, y le hablé, le conté de ciertas cosas que destruyen mi Diciembre, y me dijo varias cosas “No te vuelvas un grinch!” no voy a hacerlo porque a mi me suele gustar mucho la navidad, pero una de las cosas más útiles que me dijo fue “limpia tu cuarto, mueve las cosas”.

Odio limpiar, odio, cocinar, y cualquier otra forma de trabajo casero, pero no sé por qué me movió tanto eso… llegue y comencé a limpiar, como maniática, limpie y limpie, y moví cosas, y hoy terminé de limpiar, me tomó tres días pero mi cuarto está absoluta, completa y totalmente limpio.

No es el punto la limpieza del cuarto, sino lo que ocurrió mientras limpiaba, pensé y pensé, pero también dejé de pensar; reflexioné sobre lo que había sido este año, todo lo que hice bien, todo lo que hice mal, y todo lo que hice sin saber cómo, y me di cuenta que hice demasiadas cosas mal, no fue un buen año, pero es precisamente eso lo que necesito para poder vivir el próximo. Haré en mi vida lo que hice en mi cuarto 

Saque 9 (se lee NUEVE) bolsas de basura: papeles, cartones, documentos, información impresa, planos, carpetas, cartulinas, en fin nueve bolsas de cosas total y absolutamente inservibles para mí. Una vez hecho en el cuarto, ahora le toca a mi vida, me dedicaré a sacar todo lo que no sirve, todo lo que me estorba, todo lo que me molesta, hasta que mi vida quede absolutamente libre de estas, hasta que en mi vida solo queden las cosas que valen la pena, aquellas que siempre voy a necesitar 

También es importante la caridad, saque 5 (sí, jaja se lee CINCO) bolsas de cosas para regalar, cosas que son buenas, y que en algún punto a mi me hicieron muy feliz, ahora son tiempo pasado, pero son cosas que pueden hacer feliz a otros como me hicieron a mi: una serie de juguetes de cuando era pequeña, ropa que ya no uso, zapatos, lápices, colores en fin. En mi vida haré lo mismo, dejaré ir todo lo que ya no es para mí, dejaré que las cosas sigan su curso así sea lejos de mí, así podrán hacer felices a otras personas y sabré que hice algo bueno por el mundo, decidí no luchar contra la corriente, y dejar que todo vuelva a su cauce natural, cada cosa en su camino, yo trataré de seguir por el mío.

No sólo me deshice de las cosas, no, no, no; también conseguí una serie de cosas que no me acordaba de su existencia, pero cuando las volví a ver ¡fue increíble! Fotos de cuando era pequeña con mis amigas, otros juguetes que no pude regalar, en fin cosas demasiado especiales que saqué del olvido y las volví a introducir en el espacio real y apreciable de mi cuarto. Apreciaré lo que tengo, incluso aquellas cosas que no siempre veo, y las devolveré a mi vida. A veces, me enfoco en una sola cosa, y dejo de un lado lo demás, espero no volverlo a hacer, le daré un espacio individual a cada cosa importante en mi vida lo traeré del olvido de vuelta al presente, y quien sabe, a lo mejor la felicidad tengo que traerla del pasado y hacerla presente. Yo creo que pecamos de tener demasiada esperanza en el futuro, a lo mejor si miráramos más seguido lo que tenemos, incluso lo que tenemos olvidado, fuéramos más felices.

Limpié polvo, demasiado polvo, a mi me da alergia el polvo, y lo quité todo. Ahora respiro bien en mi cuarto, y asimismo espero quitar todo lo que me haga daño de mi vida, igualito que con el polvo, con un trapo y algún químico, quitar todo lo que me haga daño, todo lo que no me deje respirar.

TOTAL: 14 bolsas de cosas menos en mi cuarto
Aprox. 1 de cosas que volvieron a la vida


Qué irónico que mientras menos cosas haya soy más feliz, o mejor dicho. No es la cantidad de cosas, sino la calidad de ellas, prefiero la bolsa de las cosas “resucitadas” que las 9 bolsas de “basura”.

Dios me de la sabiduría para hacer en mi vida lo que hice en mi cuarto. Tu cuarto es cómo tu vida…

¿Cómo es tu cuarto?


Miles de besos

P.D.: Gracias Fab

3 comentarios:

  1. Esssssta es mi hermanaaaaa!!! esto es lo que yo queria oir de ti! esta es la actitud ;)

    Respiro tranquilo sabiendo que a pesar de todo tu vas a estar bien :) ya no me necesitas para que te cuide jajajajajaja


    te quiero con la vida, tremendo escrito, yo hare lo mismo

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  2. ahh! y por cierto... quiero una foto del pequeño cambio de look en mi mail lo antes posible, quiero ver como te queda!

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  3. Claro que no necesita que la cuides! Me tiene a mi!

    Te quiero amiga! Para eso estamos! Para las terapias, los vinos y las epifanías!

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